Las instituciones sociales y políticas partían del "lov", la cuál era una reunión de parientes inmediatos. Eran habitadas por una familia amplia, es decir, el padre con sus esposas y los hijos con sus cónyugues, núcleo de casi 30 personas que reconocían la autoridad paterna, autoridad que heredaba el hijo mayor.
Los asuntos internos de la comunidad se discutían en los cahuines, reuniones de caciquillos, indios principales y todos los que estaban unidos por el totem (dícese de aliado y protector de la familia).
El "levo", institución que juntaba de 1.600 a 4.000 personas, comprendía varios grupos totémicos o cahuines que tenían un antepasado en común. Acataban la autoridad de tres jerarquías: el "ngentoqui" o "cacique", jefe militar; el "ngenvoigue" o "toqui", jefe civil para la paz, y el "voiguenvoe", jefe religioso. Los tres empleaban un hacha como emblema de mando, diferenciada en los colores. El ngenvoigue, toqui de paz, era generalmente el jefe hereditario descendiente del fundador, En el levo se tomaban medidas colectivas no sólo sobre problemas de carácter local, sino también sobre el acuerdo o discrepancia con otros levos, la paz y la guerra y la resolución de numerosos problemas, que le daban un carácter marcadamente político. Los acontecimientos sensacionales y las grandes calamidades naturales provocaban la reunión de varios "rehues", los "aillarehues" que formaban entre sí una tribu.
La guerra con los españoles dio a los airallehues gran importancia y creó, a la vez, otra institución, el "vutalmapu", o junta de airallehues, que al principio de ella era una reunión de carácter estrictamente militar.
A pesar del desarrollo adquirido por estas organizaciones, el pueblo araucano carecía prácticamente de cohesión política y social. Los grupos que había unido el peligro común, luego de transcurrido, se desbandaba.
La organización militar de los mapuches se había desarrollado, hasta la llegada de los españoles, en paralelo incremento a su evolución social. Reunidos en aillarehues, si los augurios eran favorables, se elegía el toqui, que, a su vez, escogía subjefes y oficiales.
Los asuntos internos de la comunidad se discutían en los cahuines, reuniones de caciquillos, indios principales y todos los que estaban unidos por el totem (dícese de aliado y protector de la familia).
El "levo", institución que juntaba de 1.600 a 4.000 personas, comprendía varios grupos totémicos o cahuines que tenían un antepasado en común. Acataban la autoridad de tres jerarquías: el "ngentoqui" o "cacique", jefe militar; el "ngenvoigue" o "toqui", jefe civil para la paz, y el "voiguenvoe", jefe religioso. Los tres empleaban un hacha como emblema de mando, diferenciada en los colores. El ngenvoigue, toqui de paz, era generalmente el jefe hereditario descendiente del fundador, En el levo se tomaban medidas colectivas no sólo sobre problemas de carácter local, sino también sobre el acuerdo o discrepancia con otros levos, la paz y la guerra y la resolución de numerosos problemas, que le daban un carácter marcadamente político. Los acontecimientos sensacionales y las grandes calamidades naturales provocaban la reunión de varios "rehues", los "aillarehues" que formaban entre sí una tribu.
La guerra con los españoles dio a los airallehues gran importancia y creó, a la vez, otra institución, el "vutalmapu", o junta de airallehues, que al principio de ella era una reunión de carácter estrictamente militar.
A pesar del desarrollo adquirido por estas organizaciones, el pueblo araucano carecía prácticamente de cohesión política y social. Los grupos que había unido el peligro común, luego de transcurrido, se desbandaba.
La organización militar de los mapuches se había desarrollado, hasta la llegada de los españoles, en paralelo incremento a su evolución social. Reunidos en aillarehues, si los augurios eran favorables, se elegía el toqui, que, a su vez, escogía subjefes y oficiales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario